¿Cómo impacta el Coworking en el desarrollo de las personas?
Hay algo muy especial en los espacios de Coworking. Varios estudios indican que las personas que trabajan en ellos se desarrollan mejor; un promedio de seis en una escala de siete puntos, uno más arriba que aquellos que trabajan en una oficina normal. Entonces ¿qué es lo que hace a un Coworking tan efectivo? ¿Qué puede aprender de ellos un espacio tradicional?
Una encuesta realizada a operadores y miembros de los Coworking por el Harvard Business Review encontró tres factores principales que hacen que la gente prospere en ellos:
Sensación de que el trabajo es más significativo
A parte del tipo de trabajo que hacen, los encuestados indicaron que encontrar valor en sus labores es resultado de sentirse completos dentro del espacio. Esto lo hacen a través de varias maneras:
- Primero, el Coworking consiste de miembros que trabajan para diferentes compañías o proyectos. Debido a que hay poca competencia y políticas internas relajadas, ellos sienten que no tienen que aparentar. Trabajar junto a personas con distintas responsabilidades puede hacer la identidad propia más fuerte.
- En segundo lugar, el valor también puede venir de trabajar en una cultura donde la norma es ayudarse mutuamente y en la que hay muchas oportunidades de hacerlo. La variedad de personas sugiere la existencia de distintas habilidades que pueden ser de ayuda para otros miembros.
- Por último, el significado también puede emanar de una fuente más concreta: la misión social del Manifiesto del Coworking, un documento en línea firmado por más de mil 100 espacios. Este articula claramente los valores a los que el movimiento aspira, incluyendo la comunidad, colaboración, aprendizaje y sustentabilidad. Por eso, se podría decir que no solo se va a trabajar, sino a ser parte de un movimiento social.
Más control sobre el trabajo
Los Coworking normalmente están abiertos 24/7. Los miembros deciden si quieren estar todo el día para cumplir con un plazo o tomar un descanso e ir al gimnasio. Pueden también escoger si prefieren trabajar en un espacio relajado y sin ruido para poder concentrarse o hacerlo en un espacio más colaborativo, como mesas compartidas donde se promueve la interacción. Incluso pueden optar por no ir si tienen algún pendiente en casa.
Y aunque las personas valoran esta autonomía, la encuesta encontró que también aprecian una forma de estructura en sus vidas profesionales. Mucha libertad puede dañar la productividad. Quienes están en un Coworking afirman que pertenecer a la comunidad los ayuda a crear una disciplina que los motiva. Así, una forma limitada de estructuras permite un nivel control óptimo para los trabajadores independientes.
Sentirse parte de una comunidad
Las conexiones con otros son una razón muy importante por la que la gente decide pagar por trabajar en un espacio comunal en lugar de hacerlo desde casa. Cada Coworking tiene su vibra particular y los dueños tratan de cultivar una experiencia que satisfaga las necesidades de todos. Grind, por ejemplo, es una red de espacios de Coworking en Nueva York y Chicago. Ellos creen que el elemento humano es decisivo para seguir creciendo. Incitan la presentación entre miembros y aseguran que todos los integrantes de su staff conocen a los clientes a un nivel personal.
Por supuesto, la socialización no es obligatoria. Los miembros pueden escoger cuando quieren estar alrededor de los demás. El estudio en cuestión demuestra que los coworkers saben que existe potencial para las interacciones cuando sientan necesidad de enfrascarse en ellas.
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El Coworking y las grandes compañías
¿Cuáles son entonces las implicaciones para las grandes compañías? Si bien el movimiento tiene su origen en los freelancers, emprendedores y la industria de la tecnología, este se ha vuelto relevante en diversos sectores. De hecho, los cowokers pueden volverse parte de la estrategia de la empresa y ayudar a conseguir el éxito. Las compañías están haciendo esto de dos maneras:
1. Los Coworking están siendo usados como un lugar alternativo para trabajar. Michael Kenny, manager de uno llamado Co-Merge en San Diego, dice que las empresas establecidas utilizan cada vez más su espacio no solo para que sus empleados sean más productivos, sino para atraer prospectos que les gusta este modelo flexible.
Alejarse de la oficina y pasar tiempo en un Coworking puede traer consigo nuevas ideas. Brian Pan, fundador de NextSpace, cuenta como el equipo de innovación de Ricoh estuvo trabajando muchos meses en el espacio para observar a la gente trabajando y descubrir cuáles eran los puntos de los que más adolecían. Basados en esta información, el equipo desarrollo ciertos productos que pensaban podían ayudar los trabajadores y más tarde lo lanzaron al mercado.
2. Las lecciones que deja un Coworking pueden ser aplicadas en las oficinas corporativas. Es tan importante alentar la flexibilidad y ayudar a la fuerza de trabajo móvil como crear el mejor ambiente dentro de unas cuatro paredes. Esto no solo significa abrir un café.
En suma, la gente debe moldear su trabajo de manera que les aporte un propósito y significado. Deben tener control y flexibilidad en su entorno. El equilibrio entre espacios compartidos y privados también es crucial.
Las compañías están tratando de mejorar las conexiones que ayudan a las personas a interactuar más allá de las juntas. En un Coworking se pueden encontrar consejos, pues normalmente se llevan a cabo eventos sociales y de networking.
De alguna manera, las compañías están transformando sus oficinas igualmente en espacios de Coworking.
Este estudio demuestra que la combinación de un buen ambiente diseñado para el trabajo y una gran experiencia significan una mayor prosperidad para sus integrantes. Pero lo más importante es que los trabajadores puedan ser ellos mismos y que tengan la autonomía suficiente. Las empresas igualmente deben apoyar estas ideas para tener empleados más comprometidos con su causa.
Fuente: Harvard Business Review