Espacios de trabajo compartidos: el mundo ideal para las start-ups
Todos conocemos las historias de start-ups exitosas que empezaron a trabajar en el garaje de un familiar. El surgimiento del Coworking significó una enorme oportunidad para ellas, pues ahora tendrían espacios de trabajo compartidos en el que podrían seguir creciendo gracias al networking, acceso a freelancers y una cultura disruptiva que pretende cambiar el statu quo. A continuación, te dejamos con algunas razones por la que este entorno es el ideal para una start-up:
Networking
Una de estas pequeñas empresas necesita espacio para respirar, no encerrarse y marginarse. Un Coworking se trata de juntarse y trabajar con otras start-ups. Se pueden hacer grandes conexiones conociendo a todos los miembros del lugar.
Lo mejor de todo es que las grandes empresas están comenzando a formar parte y buscar nuevas ideas entre los más jóvenes, una oportunidad para entablar una alianza sumamente lucrativa.
Acceso a freelancers
Las áreas abiertas de un Coworking fueron diseñadas basadas en los valores de la economía compartida, como proveer a los negocios con opciones flexibles de los servicios que necesitan. Como resultado, el ambiente se vuelve más transitorio.
Muchas de las personas que ocupan este espacio son freelancers que trabajan por proyecto, algo que se lleva muy bien con la idea de construir una start-up en poco tiempo.
Con distintas habilidades, industrias y experiencias a disposición se puede crear un equipo sobre la marcha.
Reducción de costos
Los esquemas de pagos suelen ajustarse a la capacidad financiera de una start-up, las cuales están más preocupadas en invertir en sus ideas que en una oficina normal. Los gastos operativos quedan de lado y no habrá necesidad de desembolsar una fuerte cantidad de dinero al inicio.
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Flexibilidad
Los espacios compartidos proveen una solución a corto plazo y sin tanto compromiso de renta con todos los equipamientos de una oficina. Ejemplos de esta flexibilidad incluyen la posibilidad de adquirir una oficina privada por un costo extra mensual. Otras membresías otorgan la opción de trabajar hasta altas horas de la noche. Un Coworking es perfecto para quienes tienen un poco de incertidumbre sobre cuánto dinero tendrán en unos meses.
Consejos de negocios
Un Coworking presenta la oportunidad perfecta de conseguir consejos para una start-up. El acceso a una comunidad de coworkers con diferentes habilidades y experiencias puede ser de ayuda para resolver un problema en específico. Además, los mismos dueños de los espacios pueden ser quienes tengan la amabilidad de apuntar en la dirección correcta.
Algunos Coworking también son incubadoras y aceleradores, lo que significa que están especializados en hacer crecer una empresa y ofrecerle las herramientas que necesita.
Cultura alternativa
Un Coworking ofrece un entorno que empodera el emprendedurismo e incrementa la percepción del negocio.
Contratos flexibles dan acceso a los suministros y comodidades que se necesitan, como impresoras, salas de juntas, etc., a un costo que permite seguir invirtiendo en otras cosas.
También se ofrecen otros servicios como gimnasio, bares y yoga. Todo esto propicia un ambiente más colaborativo y relajado.
Diversas encuestas y estudios demuestran que estos espacios aumentan la motivación y productividad de los trabajadores. Cada día, la industria del Coworking redefine la evolución de la cultura del lugar de trabajo.
Construir una start-up en un Coworking provee una alternativa a las oficinas tradicionales. El entorno, el staff, los servicios y comodidades contribuyen a incubar ideas que pueden hacer la diferencia.
Fuentes: Wun Systems